La sanción a un asesino jamás sera suficiente para aquellos que perdieron a sus padres, hermanos, amigos… Matar no tiene excusas. Sobre todo, si estas muertes se producen por personas que fueron encargadas de velar por la seguridad, orden y paz de las personas.
El Grupo Colina, el escuadrón de la muerte, porque así lo llamaron los que conocían de sus estrategias para eliminar miembros o sospechosos de Sendero Luminoso o el MRTA, es decir; el grupo que se encargada de acabar con el terror en el Perú, irónicamente utilizaba la misma sangre fría para liquidar a cientos de personas. Culpables e inocentes morían.
El país no quiere terrorismo, pero tampoco quiere un gobierno que use su posición y poder para ordenar la muerte de personas. Culpables o no, todos merecen un juicio justo. Porque así lo dictan las leyes, porque así se gobierna en un país democrático.
Nadie puede defender a uno u otro bando. El terrrorismo hizo tanto daño como este grupo de agentes militares.
Basta recordar La Masacre de Barrios altos, entraron a matar a todos los asistentes de una pollada bailable. Aparentemente en esa fiesta se encontraban senderistas de diferentes bases. Muchos menciona que se equivocaron de fiesta y mataron a personas inocentes.
La muerte de un profesor y nueve alumnos de la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle, La Cantuta. Presuntamente sospechosos del atentado en Tarata, Miraflores. Acusaciones que nunca se pudieron comprobar…Los militares entraron a sus habitaciones los secuestraron, los torturaron y luego les dispararon en la nuca. Los cuerpos fueron hallados quemados y en fosas comunes.
Entre otras matanzas…
Actualmente:
«La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema rebajó las penas que la Primera Sala Penal Especial había dictado contra los principales cabecillas del grupo Colina, entre los que están Vladimiro Montesinos, Nicolás Hermoza, Santiago Martin Rivas y Carlos Pichilingüe, al haber anulado los delitos de homicidio calificado y lesa humanidad que se les había imputado» (Vía Peru21)
Hablábamos que todos merecen un juicio justo. ¿Realmente eso será justicia?
Masacre en Barrios Altos

Ese 3 de Noviembre de 1991, murieron 15 personas, entre ellos un niño de 8 años a manos de el grupo Colina. Foto: Archivo Caretas

En un primer momento se quiso evitar varios procesos de investigación por estar muertes, al ser evidente la participación de agentes militares. Foto: Gilmar Perez

Foto: Gilmar Perez
Asesinato en La Cantuta

18 de julio de 1992, se produce otro crimen perpetrado por el Grupo Colina, la matanza de un profesor y nueve alumnos de esa universidad. Foto: Archivo La República

Familiares desconsolados tuvieron que identificar a sus hijos, no por su cuerpos que algunos fueron quemados y arrojados a las fosas comunes, sino por sus objetos personales. Foto: Victor Ch. Vargas